TRETAS, LA POLÍTICA QUE LOS RADICALES NO QUEREMOS
Reafirmación Alfonsinista retira la lista, exige la inmediata renuncia del interventor Miguel Giubergia y urgente convocatoria a elecciones partidarias
Artimañas, mentiras sin límites. Trascendió que el interventor de la UCR, Miguel Giubergia, y sus candidatos, los abogados Diego Mariño y Carlos “Uluncha” Saravia, modificaron los términos del Acuerdo Cívico y Social, de forma tal que los lugares que le correspondían al radicalismo salteño pasaron a ser del Partido Socialista y viceversa.
Saravia y Mariño ahora serían candidatos a concejal en primer término y a diputado en segundo, respectivamente, por el socialismo capitalino. Los radicales, en este desvirtuado contexto, deberíamos elegir en las elecciones internas y simultáneas a los postulantes que ocuparían –tras el vergonzoso e inaceptable relegamiento de la UCR- el sexto orden de diputados y el séptimo de concejales.
Según versiones periodísticas difundidas por distintos medios, Saravia habría advertido a Ricardo Gómez Diez que la UCR del interior no lo acompañaría en su campaña si él y Mariño no ocupaban los cargos expectables de Capital para las elecciones provinciales de setiembre. De allí que Giubergia haya encontrado el apoyo del Partido Socialista y de Propuesta Salteña para realizar esta maniobra tan alejada del respeto a las instituciones, la democracia partidaria y una práctica política ética.
El camino recorrido por el inefable dúo para lograr ocupar el primer puesto de concejales y el segundo de diputados fue pródigo en ardides y tretas. Comenzó con la infamación pública de Matías Assennato, joven que se les presentaba como posible competidor, la firma del Acuerdo Cívico y Social a espaldas de los afiliados, la intervención de la UCR y las calumnias proferidas a José María Farizano. Siguió con la fracasada resolución plutocrática de la Junta Electoral, el frustrado intento de armar una lista del Acuerdo por fuera del partido y la derogada resolución que negaba la convocatoria a elecciones internas abiertas y simultáneas en el distrito Capital. Y ahora, la modificación de los términos del Acuerdo y la postulación inescrupulosa de Saravia y Mariño como pretendidos socialistas.
No existen palabras que describan este conjunto de acciones que resumen la política que los radicales no queremos nunca más en Salta y el país. El Movimiento de Reafirmación Alfonsinista mantiene ante la opinión pública su compromiso de construir radicalismo y hacer de la UCR una alternativa ética de poder en la provincia, para afianzar la democracia y consolidar la República.
El movimiento Reafirmación Alfonsinista, por lo expuesto, manifiesta su decisión de retirarse de la contienda electoral interna del 12 julio y exige la inmediata renuncia del interventor con la consecuente convocatoria a internas partidarias. Además, informa que el equipo de asesores jurídicos evalúa la posibilidad de iniciar a los responsables de esta traición partidaria las denuncias penales que correspondan.
